Comencemos por mi problema: soy fanático de Drácula. Esto no me dejará ser objetivo. He visto muchas adaptaciones de Drácula, uno de los personajes más llamativos de la historia del cine, personaje de cientos y cientos de filmes desde la época del cine mudo hasta la actualidad. Drácula, la inspiración del reinventado vampirismo en el estilo de Twilight y los inmortales cubiertos de escarcha y condenados por la eternidad a estudiar bachillerato. Drácula, inspiración de Lestat, uno de los vampiros más sensuales de la literatura; inspiración de Blade, el vampiro que camina bajo el sol. Drácula.
Leí Drácula hace veinte años. Antes de leer el genial libro de Bram Stoker, vi la película de Francis Ford Coppola, “Bram Stoker’s Dracula”, una de las mejores películas que he visto en mi vida. Conocí a Mina Murray (luego Mina Harker), a su prometido Jonathan Harker, a la poseída Lucy Westenra y al invencible cazador de vampiros Abraham Van Helsing pero la fascinación fue por el vampiro con poderes que las demás historias de vampiros no han sabido presentar: Drácula, el que camina de día, que puede verse en los espejos, el que puede estar en múltiples lugares a la vez. Drácula era el villano, pero el más interesante de todos.
La historia de “Dracula Untold” intenta hilar la leyenda del hombre que inspiró a Drácula con la fantasía de la novela de Stoker. Vlad III, principe de Valaquia, fue conocido como Vlad el empalador, que se dice que asesinó a más de cien mil turcos para impedir la expansión del imperio otomano y la pérdida de sus tierras. Un Héroe nacional para los rumanos es a su vez la inspiración para el monstruo más famoso de la humanidad. Drácula, en el filme, tiene que pedir poderes satánicos para alcanzar la fuerza para destruir a su enemigo que lo supera en número, y sus poderes sobrenaturales lo convierten en la amenaza más grande de la humanidad.
El filme, aunque ambicioso, cae por su propio peso. Aunque la maldición que convierte a Drácula en Drácula se dice que lo atormenta, no parece hacerlo en la mayor parte del filme. Los poderes de Drácula se convierten en una forma de “poder mutante” más cercano a los de los X-Men más que a una conexión demoníaca con el mundo, vampirismo que otros seres en el filme si experimentan. Sin embargo las debilidades no se deben a la intepretación del vampirismo sino a la debilidad de la trama y a las caóticas escenas de acción inentendibles. Es un filme corto pero parece muy largo para alcanzar su culmen y desenlace, y no logra ajustar la grandeza de la leyenda a las escenas de acción. Parece inspirada en The Lord Of The Rings, especialmente en The Two Towers, aunque sin el efecto ni la resonancia de esta historia.Sin embargo, la inmortalidad de Drácula y el final en la actualidad a la escena donde Drácula conoce a Mina Murray fue interesante y cautivadora.
Luke Evans, protagonista de este filme, no tenía mucho espacio para actuar. Sus mejores escenas son donde interactua con el “Master Vampire”, Charles Dance, que seguro recuerdas de Game Of Thrones. El resto de las actuaciones son blandas, motivado esto por el guión deficiente. Inclusive la fotografía no logra transmitir esa sensación de terror. Es un filme deficiente en el terror y en la acción, aunque intenta nutrirse de la sangre de ambos.
Mi calificación: 10 de 20. Recuerda que soy fanático de Drácula. Tal vez tu no pienses tan bien de la película.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario