[Cine] Review de “Snowpiercer”

Snowpiercer trata de un tren, con un motor “sagrado” de movimiento perpetuo, que se desplaza por rieles que recorren a toda la Tierra, más aún, Snowpiercer es un tren autosustentable, creado para no necesitar casi ningún recurso externo (aunque en la propia película se verá que algunas cosas externas son necesarias). La Tierra fue congelada por los esfuerzos del mundo de revertir el Calentamiento Global y ahora todos los sobrevivientes de la Tierra viven en Snowpiercer, dando vueltas, que duran un año, por el gélido mundo. Inmediatamente que el tren es puesto a funcionar, un sistema de clases es establecido. Snowpiercer sigue la historia de la clase más baja de todas, los polizontes, que intentan redistribuir los recursos a todos los pasajeros y acabar la opresión de Wilford, y su Ministra Mason (Tilda Swinton).

The Engine is Sacred and Wilford is Divine!

Curtis, Chris Evans, que seguro reconocerás como Captain America de The Avengers, es el líder de la revolución, en un papel muy superior a todo lo que antes le han entregado anteriormente, con matices de sacrificio y emotividad que no pensé que fuera capaz de interpretar. Curtis responde al legendario John Hurt, que interpreta a Gilliam, su consejero entre los más pobres, y protege a  Edgar, Jamie Bell, que es prácticamente su hijo. Tanya, Octavia Spencer, se une a esta revolución como una de sus líderes porque su hijo fue “cosechado” por los hombres de Wilford, y quiere recuperarlo. Todas las actuaciones increíbles, pero hay una que resalta de entre todas las demás: la genial actuación de Tilda Swinton. No es que Snowpiercer pueda solamente reducirse a este papel, porque es una genial obra de ciencia ficción y acción, sino que cada segundo de Tilda Swinton en escena es brillante, llamativo, encantador. Tilda Swinton en Snowpiercer es la mejor villana de la historia del cine, aunque tal vez ese calificativo sea muy grande y muy debatible. Es que Mason parece una caricatura, pero a la vez es real. Su expresión corporal es incomparable y la transformación física de Swinton en este personaje la hace irreconocible. Swinton es, sin duda, una de las mejores actrices de la Tierra.

En un filme que parece suceder por niveles, intentando alcanzar el siguiente vagón del tren desde atrás hacia adelante y con cada nivel con una decoración y funcionalidad particular, muchos han dicho que parece un videojuego: no saber que sorpresa hay detrás de la siguiente puerta, no saber que enemigos se enfrentarán. Bong Joon-Ho, director surcoreano, es el responsable de la puesta en escena de este filme y creo que es un director muy capaz, con completo control de su historia y de los múltiples niveles. Escenas de acción sorprendentes y  un alto nivel de violencia, narradas a una velocidad y con una composición inesperada, con giros de dominancia sobre los que se confrontan, se completan con una imaginación brillante de las dificultades de una guerra y una revolución en un tren, salpimentado con un toque de humor que le transmite más profundidad y relevancia a los eventos que se narran.

No todo es perfecto. Hacia los últimos niveles del tren la película disminuye su ritmo, y se convierte en algo más mental que emocional. Aunque esto no es necesariamente malo, este cambio de ritmo la hace un poco lenta en su segunda mitad. Sin revelar el final tambien diré que es, a la vez, desesperanzador y optimista.

Lamentablemente, el director y los distribuidores de la película convirtieron a Snowpiercer en una discusión y una batalla a muerte, y los distribuidores decidieron castigar al director, restringiendo su estreno a una limitada cantidad de cines en Estados Unidos y condenándola al Video On Demand (que no es una mala condena en los nuevos tiempos, pero que seguramente la limita en su impacto internacional). Para ver Snowpiercer hay que tener un servicio de Streaming, y no puede disfrutarse en Venezuela, el país desde donde escribo, en las salas de cine. Es una pérdida, porque es una de las mejores películas del año

Mi calificación: 17 de 20. Definitivamente una de las mejores películas de este año, con una ciencia ficción cuestionable pero fácilmente digerible. Les dejo una escena de Tilda Swinton en Snowpiercer, para que vean que realmente su papel es de otro mundo.